Desde donde estés, allí llegara el poder de Dios para sacarte, conducirte y abrirte puertas.
Entiéndelo bien, allí desde donde estés.
Tu no tendrás que hacer nada, ya que de todo, él se encargará.
Es necesario que ahora, contra todo pronóstico, creas lo siguiente:
Dios te sacará de donde estás...
Dios te conducirá por caminos incomprensibles...
Dios te abrirá puertas que nadie jamás pudo abrirte...
Mientras Dios te abra caminos, se los cerrará a todos aquellos que se deleitaron en la maldad y en la injusticia; así como también a aquellos que se alegraron de tus males...
¡Qué sorpresa se llevarán!
Dios te abrirá caminos, aunque todo esté cerrado ahora...
Tú los veras abrirse para asombro tuyo y de quienes te rodean...
Esas puertas tan selladas, y otras con sus cerrojos tan oxidados por el paso del tiempo, te serán abiertas...
Vas a ver la acción soberana de Dios en medio de acontecimientos inesperados, extraños y oportunos...
Cuando las posibilidades ya no existan, algo repentino sucederá...
Cuando las posibilidades ya no existan, algo inentendible sucederá...
Cuando las posibilidades ya no existan, algo oportuno sucederá
¡TODO SINCRONIZADO A TU FAVOR!
Que buen momento para comprobar que Dios SÍ va delante de ti en todo momento y lugar...
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