Cuando se trata de preparar a las parejas para el matrimonio, los pastores necesitan animar a los que se van a casar a prepararse para el matrimonio y no sencillamente para la boda. Las parejas tienen la tendencia en concentrarse en los detalles y preparativos para la boda, en lugar de prepararse para el matrimonio, a pesar de que la boda únicamente dura un día, pero el matrimonio es para todos los siguientes días.

Este error no solamente lo cometen los que se van a casar, sino también los creyentes. Muchos de ellos hablan de la segunda venida de Jesús y se animan viendo las señales de Su venida. No quiero decir que esto esté mal. Claro que debemos sentirnos contentos pero la segunda venida es sencillamente el primer día del reino.
No debemos simplemente concentrarnos en el fin de los tiempos, sino prepararnos para morar con Dios para siempre. ¿Se está preparando para el eterno matrimonio? Cuando uno se prepara para el matrimonio, se busca disminuir las diferencias, a unir lo que está separado, a aprender a convivir con la otra persona antes de que llegue el día. Esta vida es nuestra preparación antes del matrimonio. Prepárese con sabiduría. Prepare cada detalle con cuidado y en harmonía con el Espíritu – y pase tiempo en Su presencia porque el día de la boda viene y se va, pero el matrimonio es para siempre.

Comience a prepararse para su matrimonio eterno, tomando tiempo para estar en la presencia del Señor hoy y conociéndolo mejor a través de Su Palabra.