Dios ya tiene prevista tu defensa; él está sobre
todos los que falsamente te acusan y te juzgan sin piedad.
¡Él te lo promete ahora!
¡Créele!
“Tu pleito yo lo defenderé”. Isaías 49:25
Descansa en la defensa que Dios hará a tu favor;
nadie podrá contra él, aunque todos te acusen falsamente con argumentos
“convincentes”.
¡Que su paz te gobierne!
“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy
como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”. Juan 14:27
“Porque así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te
he puesto para luz de todas las gentes, a fin de que seas para salvación hasta
lo último de la tierra”. Hechos 13:47.
Eres consciente que en el pasado tomaste muchas
decisiones que no eran las correctas; y que si bien es cierto, Dios te perdonó
por ellas, las consecuencias quedaron.
Ahora han pasado muchos años, y con ellos, los
resultados de una vida insoportable.